top of page

Las vibraciones son movimientos oscilatorios de pequeña amplitud alrededor de una posición de referencia. Los movimientos individuales y/o en conjunto de los elementos de un sistema, como respuesta libre (perturbación) y/o forzada por cargas dinámicas, están determinados por la interacción de fuerzas elásticas, disipadoras e inerciales. Las frecuencias de las oscilaciones libres se denominan naturales y dependen de la configuración del sistema. En las oscilaciones forzadas, las frecuencias corresponden a las de excitación y de coincidir estas con alguna de las naturales del sistema, la amplitud de los movimientos se amplifican pudiendo alcanzar valores muy elevados cuando hay baja amortiguación (fenómeno de resonancia).

 

Las vibraciones, se generan en las maquinas por varios factores (principio de funcionamiento, desalineación, desbalanceo, etc.) de modo que se pueden transmitir al cuerpo humano en forma directa o indirecta en la mayoría de las actividades laborales. La respuesta del organismo y los efectos fisiológicos dependen de la dirección, intensidad, frecuencia y duración total de la exposición.

 

A frecuencias muy bajas el cuerpo se comporta como una unidad pero medida que estas aumentan, algunas partes pueden responder en forma diferenciada (incluso entrar en resonancia). La exposición ocasional puede dar lugar a efectos transitorios como ser mareo, interferencia visual, etc. La exposición prolongada, en cambio ocasiona efectos crónicos y se distinguen dos condiciones. Las vibraciones de cuerpo entero, que son habituales en la conducción de vehículos de transporte, maquinaria agrícola, etc, pueden producir artrosis lumbares y calcificación de discos de la columna. Las vibraciones en extremidad superior, comunes en la operación de  herramientas rotativas y de percusión, pueden producir afecciones articulares y vasculares.

 

El sonido es una onda mecánica de presión, producida por el movimiento vibratorio de un objeto, que se propaga en un medio material elástico (sólido, líquido o gaseoso) a una velocidad característica, como por ejemplo el aire a 330 m/seg. Las ondas sonoras, ingresan al oído por el canal auditivo hasta el tímpano, membrana en la que producen vibraciones, que luego se transmiten mecánicamente hasta el oído interno donde terminaciones nerviosas la transforman en impulsos eléctricos que se envían al cerebro.

 

Uno de los parámetros relevantes en este proceso es la frecuencia ya que el oído humano sólo puede percibir sonidos entre los 20 Hz y 20 KHz. El otro, es la presión sonora o sea la variación incremental generada por el sonido, respecto de la presión atmosférica. El umbral mínimo de percepción es de 20 mPa y el de molestia 20 Pa. Por ser el rango tan amplio (millón de veces) es mas útil utilizar el nivel de presión sonora, es decir la relación entre la presión de un sonido y la del umbral expresada en decibles (magnitud logarítmica), que para el rango de presiones mencionados corresponde a 0db y 120 db respectivamente

 

En el ámbito laboral es común referirse al ruido, como conjunto de sonidos indeseados, confusos, formados por muchos componentes cuya combinación de frecuencias no producen una tonalidad definida. El ruido está presente en todas las actividades y esta generado por la vibración de estructuras, maquinas, herramientas, circulación de fluidos en conductos, motores, vehículos, etc . Los efectos en el organismo dependen de la intensidad y duración de la exposición. Algunos pueden ser transitorios, como por ejemplo malestar, zumbido, etc, pero otros son permanentes como el caso de la perdida parcial o total de la capacidad auditiva (hipoacusia).

Ruido y vibraciones

Marco Normativo

Vibraciones

Dec. 351/79  Cap. 13

Res.295/03 Anexo V

Dec 1338/96

Ruido

Dec. 351/79  Cap. 13

Res.295/03 Anexo V

Dec 1338/96

Res. 301/11

bottom of page